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La revista Rolling Stone expresó su descontento con los Latin Grammy en un artículo reciente, señalando que la Academia Latina de Artes y Ciencias de la Grabación parece favorecer a los mismos artistas año tras año. La publicación destacó que, a menudo, la popularidad de los músicos parece tener más peso que la calidad artística en las nominaciones. Como ejemplo, mencionaron el caso de Shakira, cuya colaboración "Sessions, Vol. 53" con Bizarrap fue nominada por segundo año consecutivo, a pesar de haber sido premiada previamente.
Según Rolling Stone, artistas emergentes y con producciones destacadas, como Tainy, Álvaro Díaz, Paula Cendejas y Manuel Medrano, quedaron fuera de las nominaciones, lo que limita las oportunidades de reconocimiento para nuevos talentos. Además, la revista cuestionó el hecho de que una nueva versión de una canción ya premiada, como la de DJ Tiësto con Shakira, vuelva a recibir nominaciones, sugiriendo que esta preferencia obstaculiza la diversidad en los premios.
A pesar de sus críticas, Rolling Stone también reconoció la inclusión de discos innovadores, como los de Mon Laferte, Residente, Juliana y Rozalén, entre las propuestas nominadas este año.